El ministro de Defensa Nacional de Colombia, Pedro Sánchez, anunció la incautación de 300 kilogramos de cocaína en el puerto marítimo de Santa Marta, situado en el departamento de Magdalena. Esta operación se enmarca dentro de las acciones de la Policía Nacional para combatir el narcotráfico, fortaleciendo la vigilancia y los controles en los principales puntos de salida de la droga del país. La carga ilícita estaba destinada a Hamburgo, Alemania, y estaba camuflada estratégicamente entre un embarque legítimo de bananos, lo que complicaba su detección inicial.
Sánchez compartió detalles del éxito de esta operación en su cuenta de X, donde destacó que la intervención evitó la circulación de aproximadamente 750 mil dosis de clorhidrato de cocaína en el mercado internacional. El funcionario atribuyó el éxito de la incautación a la inteligencia y el entrenamiento especializado de la Policía Nacional, las cuales han estado trabajando incansablemente para fortalecer la seguridad en las rutas de narcotráfico.
La incautación reciente se suma a los esfuerzos continuos de las autoridades antidrogas en Colombia, que han logrado reducir significativamente el tráfico de drogas hacia Europa. En abril pasado, la Policía Antinarcóticos también había interceptado un cargamento de 1.400 kilos de cocaína en el mismo puerto de Santa Marta, oculto en un contenedor de bananos, evidenciando un patrón en las estrategias utilizadas por los narcotraficantes para intentar evadir la ley.
Sánchez subrayó la importancia de esta operación no solo por la cantidad de drogas incautadas, sino también por el impacto en las rutas de narcotráfico hacia Europa. “Este operativo afecta una ruta clave de narcotráfico hacia Europa”, declaró, enfatizando que el compromiso de Colombia no es exportar crimen, sino combatirlo con firmeza. Esta postura resalta el compromiso del país frente a un flagelo que afecta no solo a Colombia, sino a numerosas naciones alrededor del mundo.
La policía y las autoridades de Colombia continúan redoblando esfuerzos en la lucha contra el narcotráfico, un desafío que ha persistido por décadas. La vigilancia en puertos y aeropuertos es primordial para impedir que organizaciones criminales saquen partido de la producción de cocaína en el país sudamericano. Con estas acciones, el gobierno colombiano busca no solo desmantelar redes de narcotráfico, sino también enviar un mensaje claro de que la lucha contra las drogas es una prioridad nacional.








